9 de octubre de 2014

EL IRRITANTE TON-TON




El sistema más famoso de navegación
es decir el GPS que lleva un coche en su circulación
para una correcta orientación
y llegada a su destino sin equivocación
es el Tom Tom.

Pero tiene una serie de inconvenientes
que lo hace a veces muy impertinente:

Es muy conveniente en primer lugar
actualizarlo sin mucho tardar
lo cual merma algo tu economía
que en plena crisis no es precisamente una alegría;

si no se realiza tal actualización
no es aconsejable obedecerle en cualquier situación.

La nueva autopista o carretera
el tontón no la reconoce de ninguna manera
y una voz muy sonora, pesada, insufrible
te avisa girar en otra dirección “cuando sea posible”

y… o desconectas tal aparato
o te desquicia durante todo el rato
pues si la radio te informa de una noticia interesante
la voz tontonesca suena a la par anulándola al instante

y si topas con una carretera, por obras, cortada
como el artilugio no prevé tal jugada
insiste en una temeraria penetración
normalmente el conductor no hace caso a tamaña obsesión

y cuando sigues una ruta programada
pero sobre la marcha cambias de opinión
el torrontontón mucho se enfada
y constantemente te recuerda tu equivocación.

Además su pantalla puede dar lugar a distracción
si miras detenidamente su mapa en cuestión
lo que es un peligro de accidente
si tus reflejos no son suficientes.

Solamente este cacharro es más adecuado
cuando te guía a través de una ciudad desconocida
pues normalmente no ha sufrido cambios importantes en su trazado
quizás alguna dirección por ahí perdida.

Así es que salvo en este último caso de ciudad no conocida
yo me guío por las señales blancas y azules de carretera y autopista en la ruta establecida.